Victoria.- El Inspector Juan Carrizo, desde el área de Seguridad y Control Urbano municipal, se refirió al creciente saldo de multas labradas en el último mes por infracciones al tránsito, donde destaca el elevado número de conductores con altos índices de alcohol en sangre; y el tema recurrente del uso de bicicletas en las plazas por parte de menores.

Desde el área municipal se intensificaron los operativos de control vehicular en la ciudad, abarcando tanto motos como autos, labrándose aproximadamente 300 actas de infracción en ese período, una cifra que preocupa a las autoridades.

En proximidad de las oficinas de Paralelo 32, sobre Chacabuco, es común encontrar luego del fin de semana hasta 10 vehículos estacionados con las fajas de seguridad y conos para delimitar la zona. Y durante la semana, también se realizan constataciones de documentación en automóviles, no solamente a motociclistas, como se hacía en años anteriores.

“Lamentablemente, no es agradable salir a la calle y tener que hacer tantas actas”, señaló Carrizo. Reafirmando que los operativos se enfocan en verificar documentación, uso de casco y niveles de alcoholemia, especialmente durante los fines de semana.

Entre las infracciones más comunes se destacan la falta de casco en motociclistas y la conducción en estado de ebriedad. En este último punto, la preocupación crece: en las últimas dos semanas se retuvieron 18 vehículos por alcoholemia, algunos con niveles superiores a 1,00 g/l de alcohol en sangre (el permitido es 0,05). Además de la multa, los conductores enfrentan la inhabilitación temporal para manejar, dispuesta por el Juzgado de Faltas.

Otro tema que comenzó a recibir atención es el uso de bicicletas en espacios públicos. El municipio comenzó a implementar medidas ante las reiteradas quejas de vecinos. “Una bicicleta es un vehículo y debe respetar las señales, normas y ordenanzas como cualquier otro”, explicaron.

En plazas como San Martín y Moreno, se observa a diario a chicos circulando en bicicleta sin supervisión. Si bien para ellos puede parecer seguro, advierten que representa un riesgo para peatones, especialmente niños y personas mayores. Las autoridades apelan a la responsabilidad de los padres: “Desde casa se puede comenzar a plantear a los chicos que deben respetar las normas, y evitar problemas futuros”.